Anoche salimos de fiesta con unos amigos y me tocó quedarme en casa de uno de ellos y esta es la historia de como termine cogiendo a la madrastra de mi amigo. Al llevar mareado a su casa esta hermosa mujer me llevo al cuarto y me chupó la pija dejándome con ganas de follarla, pero estaba tan borracho que me quede dormido. Al día siguiente despierto y al notar que no había nadie más en la casa y sólo esta la tipa acostada sobre el sofá, decidí que era hora de follarla.
Le quité la sábana y estaba en ropa interior, así que metí mis dedos en su vagina y ella empezó a despertarse. No quería volveré a quedarme sin darle verga, así que enseguida le metí mi polla en su coño y ella se puso a disfrutar. La muy puta gemía de placer y yo termine acabando sobre sus nalgas.